Vivir con acné puede ser difícil, pero, para muchos, los problemas continúan tiempo después, ya que el acné puede dejar la piel marcada y con cicatrices y, si alguien ha experimentado acné severo, la cicatrización posterior puede ser igualmente grave y angustiante.

Sin duda, la consecuencia más notable y más grave del acné es la cicatrización, pero el acné puede dejar otras marcas como las marcas de granos causadas por la hiperpigmentación post-inflamatoria (HPI). Intenta resistir la tentación de jugar con los puntos negros, espinillas y otras imperfecciones, ya sea con los dedos o con otros implementos. Cuando se aprietan muy fuerte las imperfecciones se pueden dañar las venas finas, glándulas y tejidos que las rodean.

Las glándulas sebáceas o sudoríparas no se pueden reformar en el tejido cicatricial y el cabello no puede crecer en él. El tejido cicatricial también tiene menos fibras elásticas, por lo que la piel a menudo se ve y se siente más dura. La circulación y la hidratación también se ven afectadas, lo que hace que sea más difícil para la piel con cicatrices mantener los niveles de hidratación que necesita y puede resecarse. Lamentablemente, no es posible eliminar las cicatrices por completo, pero se pueden reducir en gran medida y hacerlas mucho menos notables. También es posible que tu piel se mejore al paso de los años.

Si decides que esas cicatrices necesitan tratamiento, existen varias opciones disponibles. La opción correcta dependerá de la naturaleza, el tamaño y la forma de estas. Aquellas que necesiten un tratamiento agresivo deben discutirse con su médico, y no se debería comenzar ningún tratamiento hasta que su acné se haya curado por completo. Visita al dermatólogo lo antes posible.